Deudas, intermediarios y cero ayudas del gobierno son algunas de las problemáticas que viven los paperos.

Agricultores boyacenses aseguran que están viviendo ahora uno de sus peores momentos debido a préstamos que les hicieron entidades bancarias para sacar adelante sus producciones y que están empezando a pagar apenas este año. “La crisis de la papa no ha terminado y está peor que antes” afirma Flor Alba Rodríguez Zamora, representante de dos asociaciones de cultivadores de papa.
Además de las deudas, los cultivadores manifiestan problemas como el precio al que los intermediarios quieren comprarles la papa; ellos no tienen mucha papa para vender porque no sembraron antes a causa del miedo a endeudarse más y no tenían dinero; y les preocupa que el Gobierno justo ahora decida importar papa y desplazar a los campesinos de la venta del producto.
El viceministro de Agricultura Juan Camilo Restrepo, explicó que medios nacionales que desde el año pasado se tiene establecido un plan para que los campesinos puedan vender sus productos a un precio acordado con un cliente a través de un contrato, en el cual se tiene la ventaja de poner un precio que ellos negocien como justo y se elimine el intermediario.
Sin embargo, Flor Alba Rodríguez manifestó que las ayudas que el Gobierno les prometió no estaban llegando como esperaban y que “se estaban perdiendo en el camino”, situación que les preocupa a ella y a las más de 1.500 familias que integran sus asociaciones.
A pesar, de que los precios se han incrementado para beneficio de los productores existe miedo colectivo a no poder cubrir la demanda suficiente y que el gobierno importe más de este tubérculo.
Se espera apoyo total a los campesinos en época de cosecha, son ellos quienes producen nuestros alimentos. Por eso lo invitamos a comprar campesino y colombiano.
